El opresor no sería tan fuerte si no tuviese cómplices entre los propios oprimidos. Con esta frase de Simone de Beauvoir (1908-1986), Patricia Flores Palacios analiza la realidad de violencia en la que las mujeres viven y en la que las justificaciones hacen creer que todo ello es normal.
La autora de esta carta abierta la envía a La Pública. La difundimos y agradecemos la confianza, así como entendemos que proteja su identidad. El testimonio se convierte en un símbolo y vale la pena reflexionar al respecto.
A más de un año de aprobada la Ley 348, para el Estado boliviano la vida y la dignidad de las mujeres no es prioridad; la realidad es elocuente… cada día mujeres son víctimas de feminicidio, cada día las familias viven tragedias, dolor y desamparo.
Poco a poco la sociedad se está haciendo más consciente de los derechos de las mujeres, está tomando acciones para frenar las actitudes o mensajes que reproducen la estructura machista y violenta de la cual somos parte, y las redes sociales son una herramienta que está ayudando a este proceso. Queda mucho por hacer, pero vamos en buen camino.


