La Pública
Quimba con el sol: Urbanismo y urbanística para la recuperación del patrimonio
La lucha por atrapar un rayo del astro rey que se filtra entre los edificios es muy paceño... y ahora cochabambino también. El urbanismo y la urbanística no solo velan por la estética de la ciudad, sino por la calidad de vida de todos los que la habitan. Parte de esa calidad implica la recuperación y la conservación del patrimonio, no la loca carrera por la modernidad.
La Feria del Libro de Autores se proyecta de Villa San Antonio a El Prado
En su tercer año, la actividad que en sus primeras ediciones se organizó en la plaza central de Villa San Antonio, llega también a la Feria Dominical de El Prado. La consigna es convertirla en una feria itinerante que lleve a los autores a visitar más barrios paceños. Además, desde este año los escritores donarán libros a colegios de la ciudad; este 2015 la Unidad Educativa Sergio Almaraz será la beneficiada.
El patrimonio de Santa Cruz se cae a pedazos
Las casas coloniales del centro de la urbe, un sello de identidad de la capital cruceña, lucen en general muy deterioradas y hasta representan un peligro para quienes transitan por las galerías techadas. La Dirección del Centro y Patrimonio Histórico recordó hace unos días en su página de Facebook que, si hubiera algún accidente, los dueños de los inmuebles serían los responsables.
"Fotógrafos" acechan a estudiantes de colegio
Planfletos que invitan a sesiones fotográficas o autos desde donde se toman fotos a estudiantes a la salida del colegio son algunas de las formas en que las redes de trata y tráfico podrían estar actuando en Bolivia. La trata interna es tan real como la trata internacional, indica la Alianza Libres sin Violencia, que junto a varias instituciones está preocupada por informar a las familias sobre las medidas de precaución que deben tomar.
Estado de coma...
Detección tardía, ausencia de salud preventiva, carencia de infraestructura y de recursos humanos especializados, falta de atención de calidad y con calidez... la lista de pendientes en materia de salud es evidente y lo dicen las historias de enfermos de cáncer, males renales crónicos y quienes portan el VIH en Bolivia. Y si "vivir bien" es todavía difícil en el país, al menos se podría morir con dignidad, plantean algunos ciudadanos.
Cómo vencer el cáncer con equipos obsoletos y hacinamiento
El Hospital de Clínicas de La Paz es uno de los tres nosocomios públicos del país al que pueden acudir pacientes con cáncer que no tienen seguro médico y carecen de recursos económicos sufientes. Un recorrido por las salas de oncología y radioterapia muestra el descuido de los ambientes donde se intenta devolver la salud a los pacientes.
De “imbéciles” y “tontos del pueblo”
David Diez Canseco, ilustrador de Ecos
“Las redes sociales le dan derecho de palabra a legiones de imbéciles que antes hablaban solo en el bar después de un vaso de vino, sin dañar a la colectividad (…) enseguida (a estos, a los del vino) los callaban, mientras que ahora tienen el mismo derecho de palabra de un premio Nobel. Es una invasión de imbéciles”. Umberto Eco
VIH: sin prevención, siempre habrá déficit de antirretrovirales
El primer caso de VIH en Bolivia se detectó en 1984. A finales de los noventa, ya era una epidemia que se llevó muchas vidas. En 2004 comenzó a llegar el tratamiento a través del Fondo Mundial, financiación que sigue existiendo hoy. Sin embargo, y a pesar de las mejoras y con una ley al respecto desde 2007, falta aplicar medidas tan necesarias como la prevención.
Dos incendios en la laguna Alalay, duros golpes a la ecología
En menos de una semana se registraron dos incendios de magnitud en riberas de la laguna Alalay. Las autoridades aseguran que los daños y sus consecuencias son incalculables.
Sólo hay 54 nefrólogos en Bolivia para un mal con visos de epidemia
Según datos oficiales de la OMS, la enfermedad renal crónica es ya una epidemia global. Se considera que el 10% de la población mundial está afectada por este "asesino silencioso". Y no hay un término más apropiado para una afección que suele mostrar síntomas sólo cuando ya es irreversible y los únicos tratamientos posibles, diálisis y trasplante, son altamente costosos e invasivos. En Bolivia, el número de especialistas resulta irrisorio si se considera la cantidad de enfermos que amenaza con multiplicar los 2.231 pacientes terminales actuales.


